Expedición salvaje a Laje de Jaguaruna
El lunes pasado, Pepe Gómez y Luca Cohen volvieron a hacer de las suyas, y corrieron unas bombas en Laje de Jaguaruna (Brasil). El domingo parecía que el swell del pronóstico no entraba, pero tan solo se demoró un día en llegar. Luego de un largo viaje, los surfistas pudieron bajarse unas buenas olas para coronar la aventura. Charlamos con Pepe y Luca que nos cuentan la experiencia en el big spot brasileño.
Fotos: Matheus Henkmaier

Pepe, dándole en la derecha espumosa de Laje.

Bomba del día, Pepe Gomez surfeando sobre la segunda roca, donde quiebra con profundidad.
Palabras de Luca Cohen
La semana pasada habíamos visto un buen swell del este, que llegaba bien a la rompiente. Pepe y yo decidimos ir a surfear, entonces contactamos a Thiago, un amigo que vive frente a la ola, nos invitó para quedarnos ahí, y salimos… Partimos sábado a la mañana y llegamos sábado de noche.
El domingo a primera hora estaban todos listos para ir a surfear, Jaguaruna es una ola que queda a 7 kilómetros de la costa. El único problema era que el domingo no entró el swell: estaba chico y con un poco de viento. Hubo algunos momentos, pero en general no estaba muy bueno. Había galera local en el agua, gente de Floripa, de Rio de Janeiro.
Volvimos e hicimos un asado, Pepe llevó un cordero de Uruguay, compartimos un lindo momento, pero estábamos medio deprimidos porque es lejos y no habíamos surfeado la ola. Chequeamos el pronóstico y vimos que el swell iba a entrar el lunes, entonces decidimos quedarnos.

La bienvenida para Luca Cohen: «Me desperté totalmente luego de esta primera ola», cuenta.
Despertamos el lunes y se habían ido casi todos los surfistas. Había un poco de viento, pero con los largavistas vi un set entrando gigante. Hablé con Thiago, se motivó, llamó a Joao que tiene una posada en Cardoso, se vino con la moto y salimos en dos motos a surfear.

Luca Cohen en acción.
La ola viene de la nada, sube y si no estás bien posicionado te tira sobre las rocas. En la primera ya pagué fuerte, y ya quedé despierto para las próximas.
La derecha de Laje es una ola cuadrada, nunca la había surfeado, a pesar de haber ido cuatro veces, siempre había corrido la izquierda, una ola buena que te deja entrarle remando, te da más oportunidad. La derecha es muy difícil. Agarramos tremendas olas, hicimos tow in.

Equipo unido, en las olas grandes entran en juego una variedad de factores para que las cosas salgan bien. Foto: RafaShot

Pepe Gomez.
Palabras de Pepe Gómez
La derecha se da vuelta en un segundo, cada ola es diferente, tenés que tener el instinto al máximo en todo momento.
El primer día estaba chiquito y el segundo día nos fuimos solos con dos motos sin embarcación, un picado revoltoso con algunas bombas quebrando sobre la roca.
El palo de Luca en su primera ola fue impresionante. A mi me pasó lo mismo la primera vez que tomé: la ola se dio vuelta y en un segundo quedé en el aire. Por unos instantes pensé que lo lograba y la hacía, pero la punta se me clavó y caí. Después tomé dos olas en la cabeza y me sacó para afuera. Pero valió la pena.